- La autopromoción inmobiliaria, consiste en edificar tu propia residencia. Por consiguiente, las Hipotecas de autopromocion, son un producto concreto para financiar la construcción de una casa en un terreno que sea de tu propiedad. La residencia puede ser para uso frecuente, para segunda vivienda o para invertir.
Hipotecas de autopromoción
- Como ves, la finalidad de estas hipotecas es diferente a la de los préstamos hipotecarios comunes, que sirven para financiar la adquisición de una residencia. Además de esto, estos productos tienen otras particularidades: el dinero no te lo van a prestar de una, hay que presentar múltiples documentos a lo largo del proceso de solicitud…
Las Hipotecas de autopromoción, son un producto concreto para financiar la construcción de una casa en un terreno que sea de tu propiedad.
¿De qué manera funciona una hipoteca de autoconstrucción?
Para pedir el préstamo a cualquier entidad, debes continuar con el mismo proceso que para solicitar una hipoteca normal: debes contactar con el banco, presentarle los documentos que te solicite, encargar una tasación y aguardar a que tu petición sea aprobada. Si la entidad ve viable la operación, vas a poder firmar el crédito ante notario.
Ten presente, no obstante, que el banco no te entregará todo el dinero de una tras firmar el contrato. En las hipotecas de autopromoción, el dinero se entrega en múltiples plazos o fases a lo largo de un periodo de unos dos años:
- Primera fase o “suelo”: cuando firmes la hipoteca, el banco te entregará un porcentaje del importe de tu hipoteca; generalmente la mitad. Con ese dinero vas a poder abonar a la constructora a fin de que empiece las obras.
- Fase de certificaciones: conforme la obra avance, la entidad te irá entregando más dinero en múltiples plazos. Eso sí, ya antes de cada pago, el arquitecto técnico al cargo de la construcción deberá garantizar frente al banco que las obras avanzan conforme lo previsto.
- Fase de fin de obra: cuando el arquitecto técnico certifique que la edificación ha finalizado y que la residencia es habitable, vas a recibir una última entrega de dinero (entre el diez por ciento y el veinte por ciento del importe del préstamo) para abonar el resto de la factura de la constructora.
Generalmente, a lo largo de esos años, se aplica una carencia de capital. Eso quiere decir, que solo se te van a cobrar los intereses de la hipoteca, o sea, que vas a pagar unas cuotas más bajas. Cuando ese plazo acabe, vas a pasar a abonar unas mensualidades normales (de capital e intereses) hasta liquidar la deuda. El plazo de devolución de las hipotecas de autopromoción, suele ser de unos treinta años como máximo.
Fuente: hipotecas autopromoción en http://www.fercogestion.com/es/blog/hipotecas-autopromocion/