Adquirir un calzado infantil correcto

 

calzado infantil

 

 

 

¿Qué calzado infantil es conveniente adquirir?

Los zapatos deben tener la horma recta. Si no la tienen, podemos crear deformidades en el pie. Si queremos asegurarnos si un calzado infantil tiene la horma recta, debemos revisar que cuando miremos los zapatos, la forma de la suela no haga cuña cara al pie.

El contrafuerte debe ser recio. A fin de que el talón se mantenga firme, nos interesa adquirir un par de zapatos cuya parte trasera del talón no sea simple de desfigurar.

El reverso del pie bien sujeto. Debemos eludir que el pie se mueva en demasía cara adelante y atrás o bien hacia los laterales, el pie debe quedar adecuadamente sujeto. De ahí que es esencial contar con calzado infantil que use velcro o bien cordones. Es por esta razón que para una buena biomecánica, calzado infantil como los mocasines o bien bailarinas, no es de lo más conveniente.

Las punteras deben ser anchas. Una puntera ancha, sin ejercer una presión excesiva, dejará que los dedos puedan moverse con determinada libertad.

Suela indeformable, mas de goma flexible. Si la suela no es indeformable y se dobla con sencillez dejará que los vicios del pie se mantengan o bien aumenten. Evidentemente, los zapatos de los pequeños, deben tener una suela de un material que evite que el peque se resbale.

Procuremos eludir materiales sintéticos. La mayor parte de esta clase de calzado ofrece poca transpirabilidad. Lo mejor es utilizar calzado infantil de piel.

 

calzado infantil

 

Procurar probar el calzado en el pie. En el pie o bien mejor dicho, en los pies, pues si bien los pies son similares, no son iguales. De ahí que, desde el Consejo General de Instituto de Podólogos recomiendan probar los zapatos de pie izquierdo y derecho. Además de esto, es mejor compralos por la tarde pues hay una diferencia del cuatro por ciento del volumen del pie respecto de la mañana.

 

Mejor zapatos de pequeño que faciliten su autonomía. En lo posible, utilizar zapatos para pequeños simples de poner y quitar por ellos mismos.
Debemos comprobar los zapatos de los pequeños primordialmente para asegurarnos que, con lo rápido que crecen, no les queden pequeños. De esta manera entre otras muchas cosas, evitaremos rozaduras, heridas y eccemas.

 

Fuente: Calzado infantil Keccos